En una narrativa que parece sacada de una película futurista, Maxpaul Franklin comparte una experiencia personal que destaca no solo la innovación tecnológica de Tesla, sino también su potencial para salvar vidas. Franklin, conocido por su aprecio hacia los vehículos de lujo, encontró en Tesla algo más que un símbolo de estatus: un salvavidas en un momento crítico.
La noche del 1 de abril, justo después de que Tesla habilitara la capacidad de Conducción Totalmente Autónoma para todos sus vehículos en Estados Unidos, Franklin enfrentó una emergencia médica grave. Alrededor de las 2:00 a.m., su bomba de insulina falló, dejándolo con una deshidratación severa y un nivel de glucosa en sangre de 670. En un estado donde cada segundo contaba, recurrió a su Tesla Model Y.
Con un simple doble clic en la columna de dirección, activó la nueva función de conducción autónoma y, para su asombro, el vehículo navegó hábilmente los 13 millas hasta la sala de emergencias del VA. El coche no solo manejó el trayecto con precisión, sino que también ofreció estacionarse automáticamente al llegar, permitiendo que Franklin buscara atención médica inmediata.
A pesar de sufrir un leve ataque cardíaco, Franklin fue tratado a tiempo y pudo dejar el hospital sin restricciones en su régimen de ejercicios, un testamento a la rápida y eficiente respuesta facilitada tanto por su vehículo como por el personal del hospital VA, que calificó como el mejor en América.
Al reflexionar sobre su experiencia, Franklin no solo agradece a Tesla y al equipo médico, sino también expresa su gratitud hacia Elon Musk por su liderazgo, a veces errático pero siempre innovador, en el avance de la tecnología que va más allá del transporte. Como alguien que se identifica en el mismo espectro que Musk, Franklin valora profundamente el compromiso de Musk con la excelencia y la innovación que, según él, ha impactado profundamente nuestro mundo y personalmente su propia vida.
Esta experiencia no solo resalta la dependencia creciente en la tecnología en nuestras vidas diarias, sino que también subraya cómo la innovación automotriz puede trascender su propósito original y convertirse en una herramienta esencial para emergencias, redefiniendo el concepto de lo que un automóvil puede hacer por nosotros.
“Tesla no solo impulsa hacia el futuro; en ocasiones, también puede ser el ángel guardián que necesitas en el camino”, concluye Franklin, quien ha recorrido más de 7000 millas en su hogar solar, ahorrando cerca de $1000 en costos energéticos gracias a su decisión de invertir en un futuro más verde y tecnológicamente avanzado.
